Junta de Andalucía

La UCO y ocho universidades públicas, junto con centros de I+D, andaluces reciben casi 6 millones para investigar en biodiversidad y cambio climático

Villamandos destaca, en la presentación del Plan Complementario de Biodiversidad, que el sistema público universitario es el principal beneficiario de las ayudas, con 3,37 millones de euros

Gómez Villamandos, durante la presentación del Plan Complementario sobre Biodiversidad.

Gómez Villamandos, durante la presentación del Plan Complementario sobre Biodiversidad. / CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

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Nueve universidades públicas andaluzas, entre ellas la de Córdoba, y cuatro centros e institutos del CSIC que desarrollan su actividad en la comunidad han iniciado 24 proyectos de investigación en materia de biodiversidad, tras la concesión de 5,89 millones de euros por parte de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación, encargada de resolver estas ayudas. Esas subvenciones se encuadran en el Plan Complementario de Biodiversidad que impulsa Andalucía, junto a las comunidades de País Vasco, Galicia, Asturias, Canarias, Extremadura e Islas Baleares, en colaboración con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y con el apoyo de los fondos europeos de recuperación. Así lo ha puesto de manifiesto el consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, durante la presentación de este plan de investigación en la Universidad Pablo de Olavide (UPO), que es la representante y coordinadora de las entidades beneficiarias. En este acto, además de presentar las líneas de esa universidad sevillana, también se han dado los detalles del trabajo que desarrollará la Estación Biológica de Doñana.

Gómez Villamandos ha destacado que “este programa de investigación permitirá fomentar iniciativas orientadas a impulsar la adaptación de los sistemas naturales al cambio climático y mitigar sus efectos”, para añadir que “esta inyección será un revulsivo para la búsqueda de soluciones que refuercen la protección de la biodiversidad, un objetivo esencial para Andalucía”. La comunidad, según ha subrayado, “atesora una diversidad biológica de las más ricas del continente europeo, en cuanto a variedad de ecosistemas y hábitats y en la riqueza de especies animales y vegetales, algunas únicas en el mundo”.

La UCO, dos actuaciones con 492.798 euros

El sistema público universitario es el principal receptor de estas subvenciones, con 3,37 millones de euros, lo que supone un 57,23% de todo el montante, para sufragar 14 proyectos y las instituciones destinatarias son las universidades de Almería (UAL), Cádiz (UCA), Córdoba (UCO), Granada (UGR), Huelva (UHU), Jaén (UJA), Málaga (UMA), Sevilla (USE) y Pablo de Olavide. La Pablo de Olavide es la que cuenta con el mayor importe, con 605.743 euros para tres iniciativas, una de ellas destinada a la coordinación del programa; seguidas de la UCA y la UGR, con 504.927 euros y dos trabajos de investigación cada una. A continuación, se sitúan la UCO, también con dos actuaciones y una asignación de 492.798 euros; así como la UAL (252.928 euros), la UJA (252.451 euros), la UMA (252.420 euros), la UHU (252.420 euros) y la USE (252.417 euros), con una línea de trabajo en cada caso.

Villamandos, durante la presentación del  Plan Complementario Biodiversidad

Villamandos, durante la presentación del Plan Complementario sobre Biodiversidad / CÓRDOBA

Al margen del sistema público universitario, el CSIC dispondrá de una aportación de 2,52 millones de euros para diez proyectos, que se repartirá entre la Estación Biológica de Doñana (1,26 millones), la Estación Experimental de Zonas Áridas (504.959 euros), el Instituto Español de Oceanografía (499.222 euros) en sus sedes de Málaga y Cádiz y el Instituto de Bioquímica Vegetal y Fotosíntesis (252.441 euros).

Este programa está enfocado al desarrollo de soluciones centradas en la naturaleza que tengan en cuenta cómo inciden en ella las actividades del hombre. Para ello se ha articulado una serie de líneas de trabajo que tienen como finalidad la monitorización y seguimiento de la biodiversidad, el inventario de los servicios ecosistémicos, la evaluación y mitigación del impacto del cambio global sobre los sistemas naturales y la aplicación de e-infraestructura integrada de observación de la biodiversidad.

El plan está cofinanciado por la Junta, con 2,67 millones de euros y por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, que asume la cuantía restante de 3,22 millones de euros, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que se nutre del Fondo de Recuperación ‘Next Generation’, aprobado por la UE para hacer frente a la crisis generada por el coronavirus.

Los equipos de investigación tendrán hasta septiembre de 2025 para llevar a cabo sus actividades. No obstante, el titular de Universidad ha aclarado que se ha solicitado al Ministerio de Ciencia una ampliación de seis meses adicionales “para que los proyectos puedan culminarse adecuadamente y se alcancen los objetivos inicialmente previstos”, ha apuntado para añadir que “esos nuevos plazos estarían dentro del margen que permite el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia”.

Los proyectos de la UPO y la Estación Biológica de Doñana

La Universidad Pablo de Olavide, además de ejercer las labores de dirección científica del programa, también se encargará de investigar para el diseño de una red de seguimiento del papel de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en ambientes influenciados por la actividad humana, o el estudio de la influencia de la agricultura regenerativa sobre la biodiversidad y el funcionamiento de espacios adehesados.

Esta universidad dispondrá, igualmente, de recursos a través del Campus de Excelencia Internacional de Medio Ambiente, Biodiversidad y Cambio Global (CEI CamBio), coordinado por esta universidad.

Por su parte, la Estación Biológica de Doñana desplegará diversas líneas de trabajo, entre las que destacan, el seguimiento de poblaciones carroñeras en relación con los parques eólicos, el análisis del efecto que tienen las aves invasoras sobre la biodiversidad o el estudio de la interacción entre las aves marinas y las actividades humanas. Asimismo, pondrán en marcha sistemas inteligentes multisensoriales para la monitorización remota de especies.

Otras líneas de investigación puestas en marcha por la Junta

Gómez Villamandos ha recordado que Andalucía, además de en el Plan Complementario de Biodiversidad, también está presente en otros tres centrados en los ámbitos de biotecnología aplicada a la salud, astrofísica y física de altas energías y ciencias marinas. “En todos estos proyectos existe una vocación de transferencia y difusión de los resultados de la investigación al tejido económico y social de Andalucía, además de una clara vocación de colaboración con todos los programas de las diferentes comunidades autónomas que también gestionan los planes”, ha remarcado el consejero.

Al margen de los planes complementarios, el titular de Universidad se ha referido a otras líneas de ayudas que tiene en marcha su departamento para incentivar la investigación e innovación en la comunidad. En el campo de la innovación y muy relacionado con la biodiversidad y el cambio climático, se ha referido al programa de incentivos de ocho millones destinado a financiar soluciones innovadoras que den respuesta al programa de la sequía que afecta a Andalucía.

En materia de I+D, también ha hecho balance, poniendo el acento en las convocatorias dirigidas a apoyar la carrera investigadora desde el inicio de la etapa formativa hasta su consolidación, con un total de 38 millones. Adicionalmente, antes de que finalice el año, las universidades públicas recibirán también 25 millones para la contratación de personal técnico de apoyo y gestión de la I+D+I. De forma paralela, la Consejería también ha lanzado la convocatoria de 25 millones de incentivos que tienen como objetivo promover proyectos en cinco ámbitos estratégicos para la economía andaluza: las sociedades inteligentes, la agrotecnología, los recursos naturales (minería y ciclo del agua), las industrias tractoras y la transición ecológica.

Todas estas líneas se han activado atendiendo a unas nuevas bases reguladoras en las que “se ha priorizado la agilización de trámites y la reducción de la burocracia”, ha apostillado.