Las singulares Cruces de Añora atraen a miles de visitantes

Son únicas y diferentes por su grandiosidad, por sus detalles, por sus tonos blancos y por el trabajo que hay detrás.

Desde hace meses las cruceras y los cruceros de Añora han venido elaborando los adornos, juntándose las personas de cada cruz en una casa vacía, local o cochera cada tarde y animando el trabajo con cantes y dulces. En muchos casos con materiales reciclados y conformando un ritual que ha hecho que esta Fiesta de Interés Turístico de la Cruz haya sido declarada Bien de Interés Cultural.

El secretismo con el que se ha trabajado en cada cruz terminaba este sábado por la mañana cuando se sacaban a la calle los adornos y las estructuras metálicas para realizar el montaje de las cruces exteriores ubicadas en las de granito situadas en calles y plazas. En un ajetreo de vecinos, llevando también las joyas y los últimos detalles que se ponen en las interiores, más pequeñas, que se montan en habitaciones de casas y envueltas en telas de fondo. La fiesta volvió a ser multitudinaria con miles de visitantes que empezaron a llenar las calles una vez que a las siete de la tarde se abrieron todas y comenzaron a llegar decenas de autobuses de distintos lugares de la provincia y de otras de Andalucía y de fuera de la región. Comenzaba la mágica noche de la Velá que se extendía durante toda la madrugada.

Los visitantes se encontraban en su recorrido con la animación de cantes y bailes con la rondalla y coral Nuestra Señora de la Peña de Añora, con la tuna El Terrible de Peñarroya Pueblonuevo y con el grupo La Juglaresca. 

Además, los artífices de cada cruz explicaban al público con qué estaban confeccionados los adornos y cómo los habían elaborado, incluso mostrando fotografías del proceso. Además, la orquesta Da Vici animaba a bailar en la Plaza España y se podían visitar distintas exposiciones.

Las ocho cruces exteriores se encontraban junto al consultorio, en la calle Amargura, en la Cruz de Arriba, la calle Virgen, San Martín, San Pedro, Cantarranas y el Chaparral. Mientras que las interiores se situaban en la calle Andalucía 2, Doctor Benítez 26, Concepción 16 y esquina calles Olivos y Concepción. Fuera de concurso estaban la de la residencia y la del colegio Nuestra Señora de la Peña.

En muchas cruces obsequiaban al público con dulces caseros elaborados para la ocasión y a las doce y media de la noche llegaba el reparto de chocolate caliente en cada una de las cruces. Avanzaba la noche y a las cinco de la madrugada el interés se concitó en la Casa de la Cultura con la suma de puntos, el fallo del jurado y la asignación de los premios.

Amparo Rísquez, presidenta de la Asociación Cultural de la Cruz Noriega, señala que «el esfuerzo que se realiza para mantener una seña de identidad de todos los noriegos se recompensa con las visitas y elogios que recibimos».

Las cruces se podrán contemplar también hoy domingo, con visitas guiadas, actuaciones y el recorrido del grupo de jotas Los Jarales. Como antesala, el viernes por la noche se celebró un espectáculo a cargo de la orquesta Panorama.