ENERGÍA

El Gobierno da a la gran industria sólo un tercio de las ayudas que exigía para bajar su factura de luz

El Ejecutivo aprueba 300 millones para compensar a las empresas electrointensivas por los costes de emisiones de CO2, muy por debajo de los 850 millones que reclamaba el sector.

Convertidor de la acería de ArcelorMittal en Gijón.

Convertidor de la acería de ArcelorMittal en Gijón. / LNE

David Page

David Page

La gran industria lleva tiempo metiendo presión al Gobierno para disparar las ayudas directas que sirven para paliar el impacto que tienen los costes de electricidad en sus cuentas y en su capacidad de competir con sus rivales europeos. Pero las presiones no han surtido efecto y el Ejecutivo repartirá compensaciones a la consumidores electrointensivos muy por debajo de las aspiraciones del sector.

Los grandes grupos industriales se benefician cada año de un sistema de compensación de parte de los costes de las emisiones indirectas de CO2 que asumen en sus costes energéticos. El Consejo de Ministros ha autorizado este martes al Ministerio de Industria a lanzar la convocatoria de este año de estas ayudas por un importe de 300 millones de euros. El importe sube un 23% en relación al repartido en los dos últimos años, con 244 millones ambos ejercicios. Pero es apenas un tercio del montante que venía reclamando la gran industria.

La Asociación de Empresas de Gran Consumo de Energía (AEGE) reclamaba un gran ampliación presupuestaria para compensar los costes indirectos del CO2 y denunciaba que el sector tiene derecho a compensaciones por un importe de 850 millones de euros este año, dado la evolución de los parámetros que se utilizan para calcular el importe máximo de las ayudas.

La industria pide más

La recaudación por las subastas de derechos de emisión de CO2 ascendió el año pasado a 3.600 millones y la Ley de Cambio Climático permite repartir un 25% de esos fondos entre la industria en riesgo de deslocalización y cubrir hasta un 75% de estos costes indirectos, por eso la gran industria reclamaba un fuerte aumento tan sustancial del presupuesto para este año.

De hecho, desde AEGE ya se calcula que el año pasado en realidad les habría correspondido ya ayudas por 450 millones de euros dados los altos precios de los derechos de emisiones de CO2 y dentro de los márgenes presupuestarios que impone la UE a este tipo de ayudas, y no los 244 millones realmente repartidos.

La patronal de los grupos industriales electrointensivos, que agrupa a una treintena de gigantes industriales como ArcelorMittal, Acerinox, Sidenor, Ferroatlántica o Tubos Reunidos, ha venido denunciando la “insuficiente aportación presupuestaria” para compensar los costes indirectos de CO2 y en relación a sus rivales de otros países de Europa. AEGE considera que ésta esta es la “principal desventaja competitiva de la gran industria electrointensiva frente a los competidores europeos”.

La industria electrointensiva advierte de que el año pasado registró una caída del 8% en su consumo eléctrico y denuncia que el descenso es del 30% en los dos últimos años, un frenazo que las compañías achacan a que siguieron sufriendo el impacto de la crisis de precios energéticos. La asociación de grandes consumidores advierte de que este año la gran industria española pagará la electricidad de media a casi 60 euros por megavatio hora (MWh), un 161% más que sus pares franceses (menos de 23 euros por MWh) y un 65% que los grupos alemanes (36 euros por MWh), contando la evolución del precio de la electricidad en lo que va de año y de la previsión del mercado de futuros hasta final del ejercicio. AEGE alerta de que les resulta difícil competir en estas circunstancias y avisan del peligro de deslocalizaciones de grupos industriales.

La Comisión Europea aprobó el año pasado una revisión del plan de ayudas del Gobierno español para toda una década. El anterior plan contemplaba 2.900 millones de euros para compensar parte de los costes de emisiones indirectas de CO2 entre 2021 y 2030, en el nuevo programa ahora Bruselas permitirá a España destinar un máximo de 8.510 millones entre 2022 y 2031. Con estos nuevos topes presupuestarios, y dada la subida de los precios del CO2, la patronal de la gran industria electrointensiva veía justificada su reclamación de más que triplicar la partida de ayudas para este año.

Reforma total

La gran industria española aspira, en realidad, a una reforma integral de la fiscalidad energética que soportan para lograr más ayudas y descuentos. AEGE ha usado un atajo para dar un paso más en sus reclamaciones y solicitar al Ejecutivo una rebaja masiva en su factura eléctrica mediante reducciones de impuestos, nuevas bonificaciones, retirada de cargos específicos y otros aspectos.

El Ministerio de Industria, comandado por Jordi Hereu, abrió un proceso de consulta pública previa para pedir propuestas para reformar el Estatuto de los Consumidores Electrointensivos, que recoge los requisitos para que los grandes clientes de luz para acceder a determinadas bonificaciones. El objetivo del Ministerio con este procedimiento era fundamentalmente simplificar la burocracia, reducir cargas administrativas y agilizar el procedimiento para reconocer a las grandes industrias la condición de electrointensivas y así facilitar la entrega de las ayudas ya reconocidas.

Pero la patronal AEGE aprovechó ese proceso de consulta pública para reclamar una reforma mucho mayor del contenido del Estatuto de los Electrointensivos y reclamar mayores descuentos en su factura, como desveló EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. La patronal reclamó una reforma integral del marco regulatorio de los electrointensivos para poder beneficiarse de más descuentos, solicitando equiparar sus condiciones a los de sus rivales de Francia o Alemania dejando de pagar el impuesto sobre el valor de la producción de la energía eléctrica (IVPEE), no soportando el cargo del Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE) y aligerando otros aspectos fiscales y de los cargos por costes ligados a la política energética.