La mitad de las mujeres asesinadas por violencia de género en 2024 residían en municipios de menos de 20.000 habitantes

Trece de las 26 mujeres asesinadas por violencia de género en 2024 residían en municipios de menos de 20.000 habitantes. La Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer) ha dado este martes la voz de alarma después de los cinco asesinatos producidos este fin de semana, recordando que "esta situación inaceptable" afecta especialmente a las que viven en entornos rurales.

La presidenta nacional de esta asociación, Carmen Quintanilla, considera que estos datos subrayan la urgencia y necesidad de llevar a cabo más acciones concretas y efectivas para proteger a las mujeres que sufren violencia, y a sus hijos en España, prestando especial atención a las que sufren violencia en entornos rurales, donde el acceso a los recursos y servicios de ayuda y protección a las víctimas son muchas veces "insuficientes o inexistentes".

"De nuevo apelamos a que se maximicen las medidas del Pacto de Estado contra la violencia que se ejerce contra las mujeres, y se asegure la protección de las víctimas, haciendo efectivos los ejes en los que se basó, o crear unos nuevos que sean más para dar una mejor respuesta institucional", destaca.

Así mismo, hace hincapié en que se refuercen las medidas de seguridad y las cautelares de protección a la víctima, con el fin de que tenga un efecto disuasorio del agresor, y así asegurar que se protege mejor a la víctima ante futuras agresiones.

Recursos disponibles

En lo que va de año, 26 mujeres y nueve menores han sido asesinados, y 14 menores se han quedado huérfanos a consecuencia de esta lacra. Desde la Asociación de Familias y Mujeres Rurales recuerdan que todas aquellas víctimas que residan en pequeños municipios, y/o todas aquellas mujeres que estén en riesgo, pueden acudir a la oficina de asesoramiento y prevención que Afammer presta de manera telefónica en el 926232798, de manera presencial en la sede nacional ubicada en la Calle Montesa, 9, Bajo B de Ciudad Real, o a través de sesiones virtuales con las usuarias que requieran este servicio de la manera que mejor les convenga.

"Estas mujeres tienen en Afammer una mano amiga, pues somos un lugar seguro donde pueden estar protegidas y encontrar las herramientas de asesoramiento legal, psicológico y formativo para salir del círculo de violencia en el que se encuentran. Porque como he mencionado en varias ocasiones, una vida de maltrato es una vida perdida", recalca Quintanilla.