reportaje

Referencias reales de hoy

La profesora Raquel Luján y su alumna María, del IES Santa Rosa de Lima, reconocen el interés de conocer a científicas en activo

La UCO lleva a las aulas a sus investigadoras

Raquel Luján cree que se necesitan referentes actuales.

Raquel Luján cree que se necesitan referentes actuales. / Manuel Murillo

El IES Santa Rosa de Lima de Córdoba tiene una larga tradición de actividades de fomento de la igualdad. La profesora Raquel Luján lleva 15 años colaborando en la organización de diversas actividades de visibilización de las figuras femeninas en las disciplinas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas por sus siglas en inglés): trabajos de investigación, exposiciones, representaciones teatrales, cineforum, escape rooms… Entre estas acciones, esta docente colabora con los talleres divulgativos organizados por la Unidad de Cultura Científica e Innovación (UCCI) de la UCO que permiten que investigadoras de la universidad acudan a los centros educativos para hablar al alumnado de su trabajo y su experiencia. «Accedí a estos talleres con la certeza de que serían un recurso acorde a nuestro objetivo y con la calidad que identifica a la UCCI», señala Luján.

«Como docente le veo muchas ventajas a este formato. La más interesante es que las ponentes se encuentran a una distancia perfecta para influir en el alumnado. En clase les podemos presentar historias de personas de otro siglo o de otro lugar. Pero pueden resultar demasiado lejanas para servir de referente. Sin embargo, las investigadoras que nos visitan trabajan en nuestra universidad, pasean por las mismas calles que nosotros... Han recorrido un camino muy similar al que nuestras niñas y nuestros niños pueden recorrer. Y están ahí mismo para contárselo. Porque estas profesionales no vienen a exponer su trabajo en una clase magistral, sino que dedican buena parte del taller a responder con generosidad a todas las preguntas del alumnado sobre su campo de estudio, la universidad, salidas profesionales, sobre el esfuerzo», destaca. 

La docente destaca que los talleres presentan al alumnado la realidad de la investigación

Una de las alumnas del instituto, María, de 13 años, es una de las estudiantes que ha participado en los talleres que llevan a investigadoras de la UCO a las aulas. «Esos talleres me han parecido bastante interesantes para concienciarnos del papel de la mujer en la historia y en la actualidad, tanto en las ciencias como en otros ámbitos».

Impacto

Esta docente considera que, en general, estos talleres tienen «un gran impacto» sobre el alumnado, sobre todo, de 4º de ESO. 

«Se les presenta la realidad de la labor investigadora y se les acerca temas de interés que no están en nuestros planes de estudios. Esto favorece un diálogo en clase sobre sus intereses profesionales que refuerza el trabajo realizado por nuestro orientador escolar en este momento clave de elección de estudios postobligatorios», señala y comenta que «no es raro que en los días posteriores al taller el alumnado siga haciendo referencia a los temas tratados y los relacione con su futuro académico», afirma.

María reconoce que los talleres de la UCO son muy interesantes.

María reconoce que los talleres de la UCO son muy interesantes. / Manuel Murillo

Su alumna, de hecho, «destacaría la amabilidad de la investigadora que dedicó parte de su tiempo para venir a nuestro instituto», comenta.

Referentes actuales

Raquel Luján cree que es importante para el alumnado contar con referentes con los que identificarse. «Y se ha avanzado recuperando figuras ocultas del pasado de las ciencias».

«A mi siempre me han gustado las ciencias. Sin duda, me parecen bastante interesantes, aunque actualmente no tengamos registros de mujeres que han sido importantes en esos ámbitos en el pasado», dice la joven María.

No obstante, su profesora opina que «no creo que debamos forzar más la proporción de referencias femeninas y masculinas en los libros de texto cuando se habla de descubrimientos del pasado. Prefiero crear situaciones en el aula que lo explique. Por ejemplo, poner en evidencia la desigualdad en el derecho al acceso al conocimiento de tiempos pasados y los avances del presente en este sentido», apunta. 

María, una alumna de 13 años, cree que la actividad ayuda a concienciar sobre el papel de la mujer

En este aspecto, la profesora indica que «hay buenos materiales complementarios con esta finalidad. La incorporación de fechas en nuestro calendario escolar, como el 8 de marzo o el 11 de febrero, nos ofrece la oportunidad de utilizarlos. Y usar datos reales y cercanos del presente, que les permita concluir que el problema no está en la capacidad de la mujer, como que nuestro alumnado cuenta con más profesoras que profesores en estas áreas o el éxito profesional de Casiana Muñoz, que antes de ser astrofísica fue una niña que estudiaba en el Santa Rosa de Lima, o las visitas de nuestras antiguas alumnas y sus historias profesionales».

Optimismo

Aunque falten referentes femeninos en los libros y aún no haya igualdad en el ámbito científico-técnico, Raquel Luján es optimista sobre el futuro. «Observo los cambios que se están produciendo en los últimos años y veo que son lentos porque tratan de modificar una inercia de siglos. Pero no dejamos de avanzar», subraya.

La joven María lo corrobora mostrándose muy segura sobre su capacidad de desarrollar una actividad científico-técnica: «Mi opinión no ha cambiado sobre las carreras científico-técnicas, ya que actualmente no tengo seguro qué carrera escoger. No descartaría nada que tenga que ver con las ciencias. Me siento igual de capaz de afrontar cualquier disciplina», reconoce.  

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