Adiós al melón: los expertos piden dejar de comerlo por este motivo

Estos son los motivos para pensarse dos veces el consumo de melón este verano

Estas son las tres enfermedades que se combaten comiendo melón

Estas son las tres enfermedades que se combaten comiendo melón

Con el verano a la vuelta de la esquina, el melón se ha convertido en un invitado más a las mesas de toda España. Desde siempre, su sabor refrescante y dulce junto a su significativo contenido de nutrientes y agua lo han convertido en una estrella del periodo estival en nuestro país.

Pero, aunque se trate de una fruta deliciosa y muy saludable por lo general para la dieta hay casos en los que se debe limitar su consumo o incluso eliminarlo si los expertos lo recomiendan.

Por lo demás, el melón es mucho más que una fruta típica del verano: tiene una composición del 90% de agua que lo convierte no solo en una fuente excelente de hidratación, sino en una opción ideal para el calor abrasador.

Además, su alto contenido de vitaminas y minerales esenciales (que incluyen vitamina A, vitamina C y potasio) son ideales para que nuestro sistema inmunológico se mantenga saludable y evitemos un buen número de enfermedades.

A esto se le suma el alto contenido en fibra que tiene, podemos conseguir sumar una ayuda para tener una digestión saludable e incluso perder peso si es lo que deseamos.

Cuando decir 'adiós' al melón

Aunque comer melón reporta múltiples beneficios, hay que prestar atención en los casos donde, por ejemplo, se sufren problemas de azúcar, alergias o sensibilidad digestiva.

Por su alto contenido de azúcar natural, el melón podría no ser la mejor fruta para las personas que estén intentando controlarse este parámetro. Si no se toma con moderación, el alto contenido de fructosa podría elevar el índice glucémico.

Además, al igual que con cualquier otro alimentos, algunas personas podría ser alérgicas al melón. Algo de lo que habría que empezar a sospechar si se experimenta la sintomatología de picazón en la boca, hinchazón o dificultad para respirar después de comer melón. Por otra parte, también se pueden dar intolrenacias digestivas como malestar estomacal o gases.

Para quienes tienen el sistema digestivo sensible el melón puede ser difícil de digerir provocando malestar en el estómago, hinchazón o problemas como el síndrome del intestino irritable para lo que es recomendable limitar o evitar el consumo de melón.